“En los últimos años Chillán fue una de las comunas con mayor cantidad de proyectos en Biobío que se adjudicó el programa Quiero Mi Barrio del Minvu y ahora como nueva región vamos a partir con uno nuevo”, dijo el alcalde Sergio Zarzar por la iniciativa que beneficiará a tres juntas de vecinos de la comuna.
A las experiencias anteriores en las poblaciones El Roble, Irene Frei, Martín Ruiz de Gamboa, Óscar Bonilla, Santa Filomena, Santa Rosa y Quinchamalí, se suma ahora la Población Sarita Gajardo, uno de los barrios emblemáticos de Chillán.
La jefa de Barrio, Doris Rivas, dijo que en este caso se incluye a las juntas de vecinos Sarita Gajardo y Ampliaciones, Marta Brunet y Sarita Gajardo y Ampliaciones II.
El programa considera un periodo de ejecución de 42 meses (casi cuatro años) y una inversión de $838.676.642, de los cuales $66,6 millones los aporta el municipio y $6,6 millones los vecinos.
“La primera fase de ocho meses de duración contempla la instalación del programa en el barrio y la elaboración de un diagnóstico compartido que generará los insumos para la elección de iniciativas urbanas y sociales, además de la conformación de la organización territorial de los vecinos en un Consejo Vecinal de Desarrollo, y la definición de un Plan Maestro que incluye obras e iniciativas sociales, entre otros”, indicó.
En la siguiente fase de treinta meses de duración se diseñarán y se ejecutarán los Planes de Gestión de Obras y de Gestión Social, basado en los ejes transversales del programa que son “Identidad y patrimonio, Seguridad y Medio Ambiente”. La última fase de evaluación y cierre tendrá una duración de cuatro meses.
El Programa Quiero Mi Barrio del Minvu tiene por objetivo contribuir al mejoramiento de la calidad de vida de los habitantes de barrios que presentan problemas de deterioro urbano y vulnerabilidad social, mediante el mejoramiento y/o dotación de espacios públicos, equipamiento comunitario y entornos barriales.
En este caso el programa estará a cargo de la Trabajadora Social, Doris Rivas, acompañada de la arquitecta Naira Muñoz y de la relacionadora pública Ilse Winser.