Las declaraciones de la ministra de la Mujer Antonia Orellana respondiéndole al Cardenal Fernando Chomalí que "las decisiones no se toman pensando en los deseos de los príncipes de la Iglesia" han sido calificadas como “fuera de lugar” e “irrespetuosas” por diputadas del Partido Social Cristiano.

En esa línea, la parlamentaria socialcristiana Francesca Muñoz señaló que “las ironías hacia quienes pensamos distinto son una clara señal de totalitarismo con el que el gobierno ha tratado de imponer su ideología.”

Además, enfatizó en que “desde el minuto uno ha cuestionado a quienes tiene una opinión diferente cuando se trata de defender la vida, por lo que llamo a la ministra a ser más respetuosa, ya que debe garantizar el diálogo y el respeto.”

Quien respaldó la postura de la diputada Muñoz, fue Yovana Ahumada, también parlamentaria del Partido Social Cristiano, que indicó que “en vez de aportar al debate sólo se ha dedicado a lanzar mensajes irónicos y despectivos. Estas actitudes no enriquecen el diálogo, sino que sólo lo empañan.”

Finalmente, recordó que “ella guardó silencio cómplice frente al episodio más serio de este gobierno protagonizado por Monsalve. Debe entender que su rol principal es liderar con claridad y compromiso en temas realmente importantes para las mujeres y no sólo emitir opiniones descalificadoras.